El otro día vi en un anuncio del aire acondicionado Art Cool 4500 de LG que tenía una lámina de El beso de Gustav Klimt, y desde entonces he visto por muchas partes proliferar láminas de este artista, e incluso usarlas para patrocinar otros productos.
Gustav Klimt fue un pintor simbolista austríaco de la segunda mitad del siglo XIX, y uno de los miembros más prominentes del movimiento Art Nouveau de Viena. Sus mayores trabajos incluyen pinturas, murales, bocetos y otros objetos de arte, muchos de los cuales están expuestos en Viena. El año pasado durante mi estancia en esta ciudad aprendí bastante sobre este pintor, y es por eso que me ha sorprendido al ver su obra más conocida anunciando un aparato de aire acondicionado.
Klimt es conocido por el uso que hacía del oro en sus pinturas. Klimt también fue famoso por representar mujeres desnudas en sus pinturas, siguiendo el criterio del art nouveau, ilustrándolas etéreas y seguras, casi como sirenas rodeadas de flores y oro. Sus modelos eran generalmente mujeres que pertenecían a la burguesía vienesa, pero también tenía un séquito de prostitutas que le servían de musas. El tema que trata en la mayoría sus cuadros es la sexualidad femenina y el equilibrio con la masculinidad.
Un número considerable de sus obras fue confiscado por la dictadura nazi. Al contemplar que las fuerzas aliadas estaban ganando la guerra y que las obras del artista se convertirían en botín de guerra, los nazis optaron por quemar el castillo donde éstas permanecían confiscadas.
En junio de 2006 una de las pinturas de Klimt (el retrato de Adele Bloch-Bauer) se convirtió en la segunda pintura más cara de la historia, al venderse por 135 millones de dólares.
